Entrevistamos a Uxía Gutiérrez, coordinadora de la biblioteca virtual Bibliosaúde, la red de cooperación integrada por las bibliotecas de los centros hospitalarios del Sistema Público de Salud de Galicia.
En un momento tan complicado para nuestros servicios de salud, apreciamos mucho su testimonio experto. Uxía Gutiérrez nos habla sobre su trabajo diario como bibliotecaria en Complexo Hospitalario Universitario de Ferrol, describiendo las particularidades de esta importante faceta de la documentación sanitaria. En la entrevista también nos avanza algunas de las primeras consecuencias visibles de la pandemia para nuestro entorno profesional.
(Archivoz) ¿Cómo llegaste a ser bibliotecaria en un hospital?
(Uxía Gutiérrez) Pues yo estudié en la Universidade de Santiago de Compostela, realicé la licenciatura de Geografía e Historia. Primero me especialicé en Arte, y posteriormente hice la especialidad de Archivística y Biblioteconomía en la misma universidad. En el año 1990 estaba trabajando como colaboradora en la biblioteca del Ateneo Ferrolán por las tardes y en una biblioteca escolar durante unos meses por las mañanas, y salió una convocatoria en el periódico en la que solicitaban personal para la biblioteca del Hospital Arquitecto Marcide. Me presenté, hice unas pruebas y entrevistas y así empecé a trabajar en una biblioteca de hospital. Posteriormente, en el 2005 el Servizo Galego de Saúde convocó oposiciones también para bibliotecarios y consolidé la plaza como personal estatutario.
(Archivoz) ¿Qué balance harías sobre la evolución de la gestión documental y las bibliotecas en el ámbito hospitalario, durante todo este tiempo?
(UG) Bueno, pues como llevo tanto tiempo en este ámbito hospitalario, nada más y nada menos que 30 años, te diré que la evolución ha sido como un viaje desde la prehistoria a un futuro de ciencia ficción, ja, ja, ja,
He pasado desde el libro de registro manual y los ficheros catalográficos a un SIGB, una biblioteca virtual, un repositorio, un descubridor y un gestor de enlaces, entre otros. De la fotocopiadora al escáner. Del CD-ROM y el fax, a Internet, a la nube y el correo electrónico.
La evolución de las TICs ha supuesto una revolución en nuestro trabajo y nuestras bibliotecas. Ha cambiado todo: la gestión documental de la biblioteca, los espacios, los servicios, incluso la visión y el papel de los bibliotecarios y documentalistas. Ya no nos ven como los que prestamos libros, somos gestores de la información y del conocimiento, curadores de contenidos, community managers, gestores de redes sociales, creadores de webs, analistas de datos…
Las tecnologías nos han proporcionado nuevos roles que hemos incorporado a los tradicionales de gestionar y recuperar información, que seguimos realizando, aunque con nuevas herramientas.
(Archivoz) ¿Podrías describir la experiencia de Bibliosaúde, la red que coordinas? ¿Qué otros hitos destacarías en esa evolución?
(UG) Bibliosaúde es una biblioteca virtual y una red de bibliotecas de centros hospitalarios y la Consellería de Sanidade, del Sistema Público de Salud de Galicia. Se fraguó durante 2007 y se inauguró en 2008. En aquel momento teníamos claro que había que hacer la transición a lo virtual, pero no queríamos prescindir del personal que ya teníamos, por eso nos decidimos por un modelo integrador, en el que en lugar de crear una nueva biblioteca virtual al margen de las bibliotecas presenciales, las integrase y fuesen estas mismas bibliotecas presenciales el núcleo de trabajo y el personal que crearía la biblioteca virtual. Al seguir existiendo el componente presencial, nos asegurábamos también de no perder visibilidad en el medio virtual.
En ese momento nos pareció lo más rápido y también lo más económico. Además el personal bibliotecario pasó a ser parte de la nueva biblioteca virtual, se sintió implicado en el proyecto, pues eran los protagonistas de ese cambio.
No estoy arrepentida de este modelo participativo, pero si es cierto que a veces se nos duplica el trabajo, pues sumamos al trabajo de la biblioteca hospitalaria el de la biblioteca virtual. La coordinación recae en uno de los miembros de la red, y las cargas de trabajo se vuelven a duplicar.
El problema también es que en este tiempo no se ha dotado con más personal cualificado en biblioteconomía y documentación a los centros hospitalarios.
Aún así, hemos conseguido una gran biblioteca virtual, que cubre las necesidades de información de nuestros usuarios. Además del catálogo BICO, creamos contenidos como la producción científica de nuestros investigadores en SOPHOS, y preservamos y difundimos sus publicaciones científicas, clínicas, docentes o audiovisuales desde el repositorio institucional RUNA, así como la documentación institucional que se genera. Difundimos la investigación de nuestro personal a través de las redes, sobre todo twitter, y nuestro trabajo docente en facebook y en un canal de youtube también, o curiosidades históricas de nuestras bibliotecas y hospitales en pinterest.
Los programas de formación son esenciales en nuestro trabajo. Formamos mediante la creación de guías y tutoriales y con cursos de formación continuada, tanto presenciales como en línea, sobre todo al personal sanitario, pero también en recursos de gestión y administración como Aranzadi, La Ley, o Mementos.
Una labor que requiere tiempo y conocimientos específicos, es la de evaluar las colecciones y los fondos de la biblioteca virtual, negociaciones con editores, la gestión económica, todo un proceso laborioso y fundamental en el ámbito sanitario.
[bctt tweet=»Cuando la necesidad de información es asistencial, el factor inmediatez es fundamental. Ha de ser consultable en cualquier lugar: consulta clínica, a pie de cama, una ambulancia, urgencias, donde la necesiten en ese momento.»]
(Archivoz) A diario ayudas a los profesionales del servicio público de salud a localizar la información que necesitan en bases de datos especializadas de todo el mundo. ¿Qué caracteriza al usuario en el campo biomédico?
(UG) Los usuarios de los servicios de salud son muy variados, desde médicos, que conforman el mayor porcentaje de usuarios que nos demandan información, hasta enfermería, técnicos de salud de diferentes especialidades, investigadores, psiquiatras, psicólogos, farmacéuticos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales e incluso personal de gestión, como jurídicos o economistas. Es un espectro muy variado.
Pero no cabe duda de que el principal grupo demandante de información en los hospitales son los sanitarios y sobre todo los médicos. Necesitan información a tres niveles, docente, asistencial e investigador.
Este tipo de información ha de estar muy actualizada, y ha de ser fiable, de calidad, basada en evidencias, evaluada y contrastada, y por supuesto muy ágil. Cuando la necesidad de información es asistencial, el factor inmediatez es fundamental, y ha de ser consultable en cualquier lugar: la consulta clínica, a pie de cama del enfermo, o en una ambulancia, las urgencias, donde la necesiten en ese momento.
Por eso es importante que el acceso a recursos de ayuda a la toma de decisiones clínicas, pueda realizarse durante las 24 horas, los 365 días del año, y desde cualquier lugar y dispositivo. En ese sentido la Biblioteca Virtual Bibliosaúde ha contribuido mucho a mejorar el acceso inmediato a la información.
(Archivoz) ¿Cómo valoran los usuarios el servicio que prestáis?
(UG) Yo diría que lo valoran muy bien en general. No sólo la evaluación de los recursos que ponemos a su disposición en la Biblioteca Virtual, si no también servicios como el SOD, para obtención de documentos. Es imposible suscribir todos los títulos de publicaciones científicas que existen a nivel mundial y que se indexan en las principales bases de datos internacionales biomédicas como Medline, Embase, Scopus, Web of Science, Cinahl y otras como IBECS, Cuiden o Medes en el ámbito hispanoamericano. Por eso el servicio de solicitud y obtención de artículos y el préstamo interbibliotecario son de los más demandados en nuestro tipo de bibliotecas. Se localizan y obtienen miles de artículos al año en otras bibliotecas sanitarias, para que los usuarios tengan acceso a esa información.
Las búsquedas bibliográficas, son un apoyo fundamental para ellos en los ámbitos de investigación y docencia, y como apoyo a las tesis, publicaciones, trabajos de fin de máster, revisiones sistemáticas, guías de práctica clínica, etc. Creo que también es muy apreciado por ellos, tener especialistas que realizan estas búsquedas, muchas veces complejas, que les requerirían a ellos disponer de un tiempo que no tienen dada su carga asistencial y laboral, y una profundidad de conocimientos de las bases de datos que se escapan a sus conocimientos.
Aun así trabajamos mucho como formadores, tanto presenciales como en línea, para enseñarles a buscar correctamente en las principales bases de datos y los recursos que ponemos a su disposición. Así aprenden a utilizarlos y para qué sirven, y en qué circunstancias es más adecuado consultar unos u otros.
Atención Primaria ha sido una de las grandes beneficiadas, con la creación de la biblioteca virtual, pues pasó de no tener acceso a bibliotecas que eran tradicionalmente hospitalarias, a tener a su alcance herramientas que les facilitan la actualización de conocimientos continua. Ha supuesto una democratización del acceso a la información, que valoran muy altamente.
(Archivoz) ¿Además de la lectura de libros qué o otros servicios demandan los pacientes y usuarios del hospital?
(UG) En mi hospital no existía biblioteca de pacientes, hasta que empezamos a trabajar en el proyecto de Biblioterapia con la Axencia do coñecemento en Saúde (ACIS) y Avalia-T, que es la agencia de evaluación de tecnologías sanitarias del Servizo Galego de Saúde. Este proyecto es un paso más allá de la simple lectura de libros, pues implica una selección y evaluación de libros por un grupo de expertos que incluía pacientes también, durante un año. Es una colección pensada para que el personal sanitario pueda “prescribir” estas lecturas, igual que se prescribe un fármaco y como complemento a estos, a determinados pacientes como ayuda a situaciones personales, o determinadas patologías, que les ayudarán a comprender lo que les está pasando y a superar determinadas circunstancias. Además este proyecto nos llevó a cooperar con la red de las bibliotecas públicas de Galicia.
Más allá de esto, sabemos que no toda la información de salud que circula por Internet es confiable, y nos preocupa mucho este tema de la “formación en salud a la ciudadanía”, por eso en la biblioteca virtual Bibliosaúde tenemos una selección de recursos bajo el epígrafe “Bibliosaúde para cidadáns” donde se han evaluado y seleccionado recursos y webs de salud dirigidos a pacientes de calidad validada y fiable y adaptados a su legibilidad de lectura de términos médicos.
Colaboramos desde el principio con E-Saúde, el portal digital dirigido a pacientes del Servizo Galego de Saúde que ofrece información verídica, legible y confiable de salud para la ciudadanía, realizando glosario de términos médicos en la información de salud de la A a la Z.
También hemos participado en cursos a asociaciones de pacientes, explicándoles como seleccionar información fiable y de calidad en salud en Internet, y cuáles son las fuentes que deberían consultar.
(Archivoz) ¿Cuáles son las labores técnicas que consumen la mayor parte de vuestra jornada de trabajo?
(UG) Sin duda la selección y evaluación de herramientas y colecciones, porque hay que conocerlas en profundidad y estudiarlas, compararlas en caso de amplia oferta en el mercado, valorarlas, y esto consume mucho tiempo. Luego tus conocimientos y valoraciones has de plasmarlos en guías y tutoriales para formar al personal sanitario en su buen uso.
Me resultaría imposible lanzar búsquedas bibliográficas especializadas en Bases de datos, si previamente no las conozco en profundidad, no las estudio y no las evalúo.
Aunque luego preparar las estrategias de búsqueda en cada base de datos consume también mucho tiempo, sobre todo cuando son búsquedas exhaustivas y muy pertinentes para estudios de investigación, publicaciones, tesis, revisiones sistemáticas, etc.
El servicio de Obtención de Documentos es muy demandado, y hay días que hay que dedicarle una gran parte de la jornada también.
Preparar la formación, consume una gran parte de tiempo y cada vez actuamos más como formadores en todos los ámbitos, presencial y virtual.
La atención al usuario, ya sea presencial o virtual, dependiendo de la dificultad de sus consultas, también requiere una buena inversión de tiempo.
(Archivoz) Además de atender las demandas de información específica de cada colectivo de usuarios, ¿qué relación tenéis con la ingente cantidad de información y documentación sanitaria que produce el hospital? En líneas generales, ¿qué trabajo que realizáis en relación con la documentación clínica?
(UG) Nuestra relación con la documentación producida en los hospitales se manifiesta en el repositorio institucional. En RUNA mantenemos una colección de Documentación Clínica institucional, la de Documentación administrativa de la organización, la de publicaciones de la organización, la de docencia, etc. Toda esa información nos encargamos los bibliotecarios de subirla al repositorio mediante archivo delegado. La coordinadora de RUNA, Carmen, se encarga de que todos los documentos cumplan los estándares y normativas necesarias antes de ser publicadas.
En la colección de Documentación Clínica, se suben los protocolos, planes de cuidados, guías, etc que se crean en la organización. Se ha añadido un campo CIE-10 que puede enlazar si se quisiera con las historias clínicas.
(Archivoz) Los servicios públicos de salud también tienen que hacer frente a la enorme carestía de las licencias en el ámbito biomédico. ¿Qué opinión te merece el modelo de negocio actual de las publicaciones científicas?
(UG) Efectivamente, el actual modelo de licencias de suscripción de colecciones resulta muy costoso de mantener, porque los precios se incrementan mucho más que nuestros presupuestos. Por eso nosotros estamos a favor del modelo de publicación de Acceso Abierto.
Creo que las organizaciones deberían de favorecer este modelo, además de manteniendo repositorios institucionales, estableciendo políticas y mandatos institucionales sobre acceso abierto, premiando en sus políticas y objetivos el depósito en repositorios, incentivando la publicación mediante la vía verde en sus repositorios, ayudando a las buenas investigaciones en los pagos de los APC (Article Processing Charge), incentivando para que sus trabajadores publiquen en revistas de acceso abierto en los baremos de concursos y OPEs y reconocimientos de méritos, o convirtiéndose en editoras de publicaciones en acceso abierto con revisión por pares para sus investigadores. Deberían también de fomentar los datos abiertos. Tienen que entender que el acceso abierto amortiza la inversión en investigación.
Creo sinceramente que estamos en un momento de cambios en el negocio de la publicación científica y las grandes editoriales tendrán que adaptar sus modelos económicos de suscripción, y tendrán que flexibilizar estos modelos actuales tan rígidos.
[bctt tweet=»COVID ha hecho tambalear los modelos de negocio y publicación actuales. Dada la urgencia, se ha incrementado la publicación en repositorios y pre-prints, que pueden ser revisadas por otros pares con comentarios y mejoras.»]
(Archivoz) ¿De qué manera ha afectado a vuestro trabajo la emergencia sanitaria del COVID19? ¿Qué otros retos tenéis por delante las profesionales de la documentación sanitaria?
(UG) COVID-19 nos ha afectado, evidentemente. Ha promovido el teletrabajo masivo, demostrando que es posible trabajar eficazmente desde casa también. Nos ha hecho recapacitar sobre la formación en línea, que deberemos de incrementar todavía más, y con otras metodologías más adecuadas que las simples guías en pdf y más interactivas.
Nos ha reafirmado en la necesidad de la cooperación con otros profesionales y bibliotecas. Aunque es algo que sabíamos y siempre hemos hecho, esta época ha venido a demostrarnos que trabajamos todos en el mismo barco y con los mismos objetivos. Esto nos ha llevado a unirnos a casi 90 bibliotecarios de ciencias de la salud de toda España y crear un proyecto como #AyudaBiblioteca #Covid-19 que se plasmó en el site COVID-19 por especialidades y temas en el que todos contribuimos en recopilar información de calidad y evaluada para todas las especialidades sanitarias. También ayudó el hecho de que muchas editoriales publicasen en acceso abierto sobre COVID. Esto ha demostrado que el Acceso Abierto es ya imparable, pues si no hubiese existido no hubiese avanzado tan rápidamente la investigación sobre COVID. Además ha hecho tambalear los modelos de negocio y publicación actuales, ya que dada la urgencia en la rapidez de transmisión de la información, se ha incrementado la publicación en repositorios y pre-prints, que pueden ser revisadas por otros pares con comentarios y mejoras de esos pre-prints.
Les hemos dado un excelente servicio adelantándonos a sus necesidades de información, ya evaluada y clasificada, gracias al trabajo cooperativo, lo que también nos ha reafirmado en nuestro papel de evaluadores y seleccionadores de la información de calidad.
Nuestros espacios físicos se han visto implicados en esta pandemia, ya que en algunos casos se han reconvertido en UCIS, en centros de citas de COVID, en salas de reunión…
Se nos han abierto nuevas perspectivas de roles, como la lucha contra la información fraudulenta en redes sociales e Internet para proteger a la población de los bulos en materia sanitaria.
En fin, tenemos un mundo abierto de posibilidades y un futuro para reescribir nuestro trabajo. Pero como reto fundamental en mi ámbito, me planteo el que se contrate a profesionales graduados o licenciados en biblioteconomía y documentación en todos los hospitales, sobre todo si son hospitales universitarios.
Gracias Isabel, por el piropo y or ser una excelente profesional al frente de tu hospital
Estupendo resumen de todo el trabajo que se realiza en una biblioteca hospitalaria. ¡Muy buena entrevista, Uxía!