En esta entrevista, charlamos con Angie Cervellera, de Wikimedia Argentina, y Shailili Zamora Aray, del Centro de Documentación Indígena No’lhametwet en Resistencia, Provincia del Chaco, Argentina, sobre la importancia de crear espacios, tanto digitales como físicos, para las voces indígenas y regionales, y cómo estos dos proyectos buscan alentar la participación en este esfuerzo de las distintas partes interesadas.
(Archivoz) ¿Cómo fue fundado el Centro de Documentación Indígena No’lhametwet? ¿Cuál es el significado de su nombre, y cómo se relaciona eso con su misión institucional? ¿Cuántos pueblos indígenas hay en Argentina, y cuántos son representados y/o participan en el desarrollo del Centro?
(Shailili Zamora Aray) El Centro de Documentación Indígena No’lhametwet está dentro del Instituto de Cultura de la Provincia del Chaco, que tiene un programa que se llama Programa Cultura Pueblos Originarios del Chaco. El programa tiene miembros de los tres pueblos reconocidos dentro del Chaco—el pueblo Qom, el pueblo Mocoi, y el pueblo Wichí—y también miembros no indígenas. Dentro de la organización, tuvieron la idea de gestionar una biblioteca y nos convocaron a mí y a mi compañera Laura Perez, que es del pueblo Qom, como estudiantes de bibliotecología, nos presentaron la idea, y juntos iniciamos el proceso de idear y crear un centro de documentación. Esto fue hace 5 años; en ese momento, pensamos que una biblioteca no alcanzaría para contener las expresiones de los pueblos, y decidimos incluir una variedad de aspectos: archivo, biblioteca, extensión, y un área de investigación.
El nombre—No’lhametwet—significa ‘lugar de nuestra palabra’ en el idioma Wichí. ‘Wet’ es ‘lugar’, ‘lhamet’ es ‘palabra’, y ‘no’ es ‘nuestro’.
En Argentina hay 35 pueblos indígenas que se reconocen oficialmente. Dentro de Chaco hay 5 que tienen representación entre la población, pero los que son reconocidos oficialmente son los tres anteriormente mencionados. En tanto a los otros, hemos intentado representarlos bibliográficamente dentro de la biblioteca. Tenemos mucha información sobre estos otros pueblos de Argentina y del mundo en general, en castellano, en inglés y en varios idiomas indígenas.
(Archivoz) Y en el caso de Wikimedia Argentina, ¿cómo y cuándo surgió el proyecto, y cuál es su razón de ser?
(Angie Cervellera) Yo soy parte hace relativamente poco, un año y medio, pero Wikimedia Argentina está desde 2007. Es el capítulo (o filial) local de la Fundación Wikimedia, que está en Estados Unidos. Basicamente, la razón de ser de este proyecto tiene que ver con como se pensó el Internet en sus orígenes, que era un espacio libre, descentralizado; vos hablabas de la descolonización también, y en este momento estamos trabajando mucho con esto, con descolonizar el Internet en términos de una cultura que trata de homogenizar todo el tiempo.
Wikimedia Argentina está dividido en distintos programas y yo particularmente estoy en el de cultura y conocimento abierto. ‘Abierto’ es una palabra que se va a escuchar mucho en relación a nuestro proyecto: con esto queremos decir que no hay barreras para el conocimiento. No hay barreras tecnológicas, mas allá de—aclaro—la barrera que es poder acceder al Internet o a una computadora, que en este país tampoco es algo común. Gran parte del territorio argentino tiene problemas de conexión o de acceso a la tecnología necesaria. Trabajamos teniendo en cuenta eso.
‘Abierto’ también tiene que ver con no pedir nada económico a cambio de ese acceso. Tener que pagar las investigaciones es común; Wikimedia Argentina va en el sentido contrario, en que el conocimiento sea de acceso abierto, público, y que pueda circular.
Del lado de cultura, lo que tiene que circular son voces diferentes, que no tengan que ver con el relato oficial de como se construye la historia o la cultura. Nosotros nos referimos a estas voces como ‘subrepresentadas,’ pero en lo que es Internet. La idea es acercarnos a esos espacios, como el Centro de Documentación Indígena, proponer talleres, aprender—estamos con la mente abierta para poder entender otras maneras de trabajar—también digitalizamos, preservamos digitalmente el contenido de los proyectos. Damos talleres de formación, quizás en propiedad intelectual, que es algo que tiene mucho peso.

Centro de Documentación Indígena No’lhametwet
(Archivoz) ¿Cómo fue que Wikimedia Argentina se asoció con el CDI? ¿Qué rol cumplen en relación con el trabajo que se realiza allí?
(A.C.) Nosotros entramos en contacto a raíz de un evento que organizamos en Wikimedia Argentina que tenía que ver con experiencias de difusión, acceso y organización de archivos bajo un paraguas temático de identidades subrepresentadas—mujeres, LGBTQ+, comunidades indígenas—y además sumamos la cuestión de derechos humanos, que obviamente cruza todos los aspectos. En el caso particular de Argentina nos enfocamos en los procesos de memoria y justicia relacionados a la dictadura [Proceso de Reorganización Nacional, 1976-83]. La verdad es que tuvimos varios ponentes que pudieron hablar un poco de sus archivos que quizás no eran tan conocidos y que tocan temas que son muy relevantes para la sociedad. A partir de ahí, nos pusimos en contacto con el Centro No’lhametwet, porque su presentación nos impactó y nos interesó muchisimo lo que estaban haciendo.
(S.Z.A.) A partir de esa primera conexión fuimos mirando qué podíamos articular juntos. Miramos varias ideas relacionadas con diferentes proyectos que tiene en marcha Wikimedia Argentina; entre ellos, Wikipedia era el que llamaba más la atención, así que en articulación con el Coro Qom Chelaalapí y con estudiantes indígenas de la universidad decidimos organizar una serie de talleres y crear unos artículos en Wikipedia relacionados con pueblos indígenas. Específicamente, creamos artículos para el Coro Qom Chelaalapí, que es un coro indígena muy importante a la historia musical dentro del Chaco, y cuya existencia es fundamental para el pueblo Qom, y también artículos acerca del CDI y para otros referentes indígenas. En la creación de esos artículos, pudimos ver la falta de información—o de información correcta—relacionada con los pueblos indígenas en Wikipedia. Cuando tratábamos de enlazar los contenidos, no había manera de hacerlo; tampoco pudimos incluir referencias necesarias.
(A.C.) Ahí aclaro: los proyectos de Wikimedia son de acceso libre y cualquiera puede editar, pero existen algunas reglas detrás de la edición, o detrás de la carga también de archivos. Una de las experiencias que tuvimos con Shailili es que cargamos unas fotografías del Coro, fotografías que forman parte del archivo pero que no están bajo contrato de cesión de derechos muy explícito—cosa que no solo ocurre en este archivo; ocurre en varias instituciones culturales, que hay donantes de fotografías que quizás llegan a los archivos pero no firman acuerdos, dejando sin aclarar si donaron todos sus derechos—. Para poder cargarlas en los proyectos Wikimedia, las imágenes tienen que estar libres de copyright—o bien estar en dominio público o bien los que ceden estas fotos lo hacen bajo licencias abiertas, licencias Creative Commons. Entonces, nosotros al final no pudimos avanzar completamente con esas fotografías por no tener esta información de respaldo.
También, mucha de la información incluida en el archivo termina siendo oral, asi que tanto para escribir en Wikipedia o para cargar material relacionado con los pueblos originarios, nos falta lo escrito que es algo que piden los proyectos Wikimedia. Esto es algo con que nosotros no estamos de acuerdo y estamos tratando de cambiar, o de ver la manera de que esos registros se puedan usar como fuentes para todo ese contenido. Hay mucho trabajo que se puede hacer en conjunto, que va más allá de simplemente la cultura Qom dentro de Chaco, y que se expande a todas las culturas originarias que quieren participar en los proyectos. Es un problema en común.
(Archivoz) En su libro Manifest Manners, de 1999, el investigador cultural Anishinaabe Gerald Vizenor adoptó el término “survivance” (una modificación de la palabra “supervivencia”) en referencia a los esfuerzos indígenas de preservación cultural, definiéndolo como “una conciencia activa de la presencia, la continuidad de historias nativas, sin ser un mero reaccionismo, o un nombre no más que sobreviva.” ¿Cuáles son las implicaciones de este concepto para el trabajo que ustedes realizan?
(S.Z.A.) Estuve pensando bastante acerca de la fecha que mencionaste, y pienso que en un momento todos los pueblos indígenas estaban en esa parte, en sobrevivir, y diseñaban distintas estrategias para eso. Pero luego pasó un momento en la historia de los pueblos en el que ya no bastaba con solo sobrevivir, porque se estaban perdiendo muchos conocimientos relacionados con sus culturas. Nosotros pensamos que como miembros de pueblos indígenas tenemos que ejercer nuestros derechos. Los pueblos indígenas, en base a convenios internacionales y legislaciones nacionales y provinciales tienen un primer derecho, que es autoidentificarse como miembros de pueblos indígenas y a preservar su cultura en las condiciones que ellos prefieran, que ellos definan como propias para permanecer, culturalmente hablando. Con esto tienen que ver las relaciones con la tierra, con los sistemas de salud, con los derechos en general.
Otra cuestión que trabajamos mucho en el Centro de Documentación Indígena tiene que ver con innovación. Sí tenemos que preservar nuestra cultura, pero a la vez estamos inmersos en esta sociedad, en esta época, y requiere ciertas adaptaciones, no solo en el sistema económico, sino también esto va influenciando en los idiomas. Es necesario crear nuevos vocablos para definir las cosas que se van incorporando, como los celulares, las computadoras, esto mismo del Internet. Entonces, requiere una innovación muy rápida dentro de las culturas, y a la vez, tener que mantener esa identidad propia como miembros de pueblos indígenas. El Centro de Documentación trata con una mixtura de ambos; parte de su trabajo es poder ver esas posibilidades y asistir a los miembros de los otros pueblos en esa complejidad.

Compartiendo historias de diversidad cultural
(Archivoz) Como adolescente en Argentina, era lector ávido de las historietas de Patoruzú y Patoruzito. Recién de grande pude entender la medida en que estas historias reflejan la imaginación colonialista europea—el latifundista Tehuelche cuyo pasatiempo consiste en enfrentarse con malandras en compañía de su compinche Isidoro, el playboy blanco de la gran ciudad…y eso solo para empezar. En tu opinión, ¿cuál es la imágen del indígena en la imaginación popular argentina, y de qué formas busca el Centro de Documentación Indígena No’lhametwet reivindicar esa imágen a través de su proyecto?
(S.Z.A.) Pienso que no hay una única imagen dentro del imaginario de los argentinos. Creo que va variando en cada provincia. Hay un amplio espectro, desde los que piensan que no existen los pueblos indígenas hasta los que piensan que existen en la lejanía, como en la selva o en la montaña, o en otro país. Están los que los asocian más con los planes, con las personas que cortan las rutas, o con aquellos que necesitan asistencia o caridad. También están los que consideran que la existencia de los pueblos indígenas es fundamental para la existencia de la vida humana, por esto de la protección de los bosques y de las tierras, el conocimiento de las plantas, conocimiento al que muy difícilmente la ciencia ha podido llegar pero que los pueblos indígenas han mantenido y que continúan preservando y difundiendo esas relaciones con la naturaleza que han permitido que muchos espacios verdes puedan sobrevivir.
Lo que busca el Centro es ese derecho, que existimos como seres humanos y que tenemos las mismas capacidades, que podemos ser profesionales y ejercer nuestra profesión y ser igualmente indígenas, aunque usemos celulares o computadoras; también nuestra capacidad de poder hablar en muchos idiomas, no solo en el nuestro sino también en español, inglés, francés, y muchos más. Esto es algo fundamental: aún ahora pervive mucho esa imagen de que si uno habla español entonces deja de ser indígena, o si usa celulares o algún objeto tecnológico está abandonando su cultura. Nosotros estamos tratando de reivindicar esa parte de nuestras capacidades.
(Archivoz) En 2019, el Centro se sumó a la Coalición para la Erradicación del Racismo en la Educación Superior. ¿Nos podés contar un poco acerca de este proyecto? Obviamente, es un tema muy relevante a la situación indígena en Argentina (y en todo el mundo), pero como un tema que abarca una amplia variedad de grupos demográficos—tanto raciales como sociales—¿cómo puede el Centro No’lhametwet contribuir a esta conversación de forma global y referente a todos los grupos impactados?
(S.Z.A.) La Coalición integra diversas organizaciones de educación superior y organizaciones indígenas también, y todos ellos aportan desde la experiencia misma. Esto está muy relacionado con la pregunta anterior, con la capacidad y con ser profesionales. Para ser profesionales, tenemos que atravesar la educación superior, y esto requiere una adaptación muy grande, para todos pero especialmente para los pueblos indígenas. Es tener que separarse. Nosotros como estudiantes conversamos mucho sobre estos temas; no es solo la historia de uno en particular sino es la historia de muchos, y no solo de esta generación sino también de las anteriores, que no pudieron terminar sus carreras pero apoyan que sus hijos avanzen y se inscriban en las universidades y que sean profesionales, y que puedan mantener esa relación con las comunidades a pesar de la distancia.
Han habido muchas experiencias respecto a las comunidades, que las personas no vuelven o reniegan de su identidad. Es fundamental poder mantener esa identidad dentro de las universidades. Por eso se apoya mucho que haya esta educación intercultural y que sea trasversal a todos los niveles educativos, no solo al nivel primario o secundario, pero que llegue también hasta las universidades, que los profesores sean formados interculturalmente y que haya esta visión intercultural dentro de las bibliografías que se usan dentro de las cátedras. Esto es necesario para que el cambio no sea tan drástico y permita que todos los estudiantes puedan iniciar y terminar sus carreras, y que no tome tanto tiempo tampoco.
Por eso, dentro de la Coalición y desde el Centro trabajamos cercanamente con los estudiantes; es para poder mantener esos espacios para diálogo y poder apoyarlos en su continuidad, y que no solo lleguen a ser profesores o abogados sino que puedan también producir sus investigaciones desde la perspectiva de las comunidades y que ayuden también a que haya un mayor equilibrio en lo que se dice de los pueblos indígenas y en poder mostrarlo desde su propia voz, desde su propia experiencia y lo que conocen de sus pueblos. Es muy importante la Coalición, porque todos los países están en ese proceso de cambio y adaptación y estas instituciones están apoyando este proceso. Tenemos reuniones en donde se comparten estos aprendizajes y se descubren las redes que se pueden reforzar para llevar a cabo este trabajo para que otras instituciones se puedan sumar para que el proceso continúe. Una parte es la Coalición, que es a nivel institucional, y otra es la red de colaboradores; en esta queremos sumar a otros miembros de los pueblos indígenas.
(Archivoz) Volviendo a la asociación entre Wikimedia Argentina y el CDI, ¿cuál es la importancia de dar lugar entre los creadores digitales a las voces autóctonas a la región?
(A.C.) Nuestra Wikipedia en este momento está en español pero creo que sería una gran idea que podamos abordar una Wikipedia en otras lenguas. Existe la Wikipedia mapuche, por ejemplo. Pero para eso hay muchos pasos previos: la enciclopedia entra en una fase como de incubación en donde se tiene que empezar a crear artículos, y como decía Shailili, tampoco todos los que hablan ciertos idiomas saben escribirlos. Ahí también hay una cuestión complicada. Básicamente, la importancia sería darle una voz a las personas para que sean ellas que puedan hablar desde sus comunidades.
Hay cosas que van a depender de nosotros, y hay cosas que no. La accesibilidad del Internet es un tema que hay que ir adaptando en relación a diferentes contextos, pero cuando se puede convocar talleres, tratar de conectarnos con estudiantes. Hay una asociación que se llama Latinoamérica Habla que elabora teclados en idiomas indígenas; eso está buenísimo. Ellos son creadores digitales; en el mundo digital hay que ir uniendo distintos esfuerzos y armar un mapa de colaboradores y empujar juntos a que haya cada vez más representatividad de los pueblos indígenas y que tenga que ver con su verdadera identidad.
Una de las primeras veces que hablamos con Shailili, vimos un artículo sobre los Qom—que además es llamado el pueblo Toba, lo cual comentaba Shailili que es una manera despectiva de llamarlos—y la fotografía que ilustraba a la comunidad no reflejaba muy bien quienes son. Nos preguntábamos cuántos hemos leído de jóvenes los manuales escolares en tanto educación oficial y hemos absorbido relatos e imágenes que en realidad no representan lo que dicen representar. Lo ideal sería tratar de contrarrestar esas posiciones.
(S.Z.A.) Queremos poder agregar contenido en las redes que tenga que ver con los pueblos indígenas, pero desde su situación actual, no con la idea que se quedaron en el tiempo y son inmutables, sino que han ido cambiando, hemos ido creciendo e incorporando de distintas formas. Hay muchos creadores de contenido que son indígenas y prefieren mantenerse en la independencia, pero necesitamos una organización que sea abierta que los permita expresarse y colaborar desde su propio punto de vista. Con Angie, desde el programa de cultura abierta, se han dado bastante estos espacios para poder continuar trabajando.
Imágen de cabecera: Taller con Ema Cuañeri, cantante del pueblo Qom.
Imágenes usadas por permiso del Centro de Documentación Indígena No’lhametwet.
Entrevista realizada por: Vance Woods