Cuando pensamos en los grandes artistas de la Historia, la primera imagen que aparece en nuestra mente es la de sus obras. Relacionamos nombres como Miguel Ángel con la imagen de la creación de Adán en la Capilla Sixtina, y en el caso de nuestro protagonista, Edgar Degas, con sus célebres cuadros impresionistas de bailarinas. Pero a menudo olvidamos que detrás de sus obras hay seres humanos, con vidas (a menudo tumultuosas) propias, y en cuyas actividades cotidianas podemos reconocer parte de las influencias que dieron lugar a sus obras.
Se trata de una grabación breve, de apenas unos segundos, en la que se ve al pintor Edgar Degas, padre del impresionismo, paseando por las calles de París. La grabación es del año 1915, y su velocidad y calidad han sido mejorados para poder apreciar mejor los detalles de la misma. Puede parecer una obra audiovisual poco relevante; sin embargo, si conocemos los cuadros de este autor, podemos saber que se distinguía por mostrar una imagen cercana, casi fotográfica, de su entorno y de su sociedad. Una “impresión” del momento, que se refleja en el concepto mismo del impresionismo.
Sin duda, el pintor debió de sentirse muy interesado en el nuevo arte del cine, creado por sus compatriotas, los hermanos Lumière, ya que reflejaba la realidad exacta del tiempo y objeto filmado. Asimismo, nos permite ver a un importante personaje de la Historia del arte más allá de sus obras, con la cercanía que ofrece un paseo por el lugar que hizo posible su arte.
Calouste Gulbenkian Museum in Selected work 30 from Self Portrait: Renaissance to Contemporary (Anthony Bond, Joanna Woodall, ISBN 978-1855143579).
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Zuriñe Piña Landaburu
Editor de contenidos
Doctora en Ciencias de la Documentación, bibliotecaria e investigadora.
Doctora en Ciencias de la Documentación por la Universidad Complutense de Madrid, donde también obtuvo el Grado en Información y Documentación y el Máster en Gestión de la Documentación, Bibliotecas y Archivos. El título de su tesis doctoral es “Ontología de la Guerra civil española”. Actualmente trabaja como técnico auxiliar de biblioteca en la Biblioteca Nacional de España en el salón María Moliner