El asesinato del presidente del Consejo de Ministros y líder del Partido Liberal José Canalejas supuso un auténtico revulsivo aquél año de 1912. Este crimen, que terminó con el segundo intento de «regeneración desde dentro» del Régimen de la Restauración en el reinado de Alfonso XIII, ocurrió el 12 de octubre, mientras Canalejas miraba los libros expuestos en la Librería San Martín.
Este cortometraje, rodado ese mismo año, muestra la recreación del asesinato e imágenes de su entierro. Es una obra muy interesante no sólo por su contenido, sino también por el actor que interpreta al asesino, Manuel Pardiñas: un joven Pepe Isbert, de veintiséis años, antes de convertirse en uno de los actores más grandes del cine español.